Moscú, 26 jul (PL) Los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, conversarán el 9 de agosto en la ciudad rusa de San Petersburgo, confirmó hoy aquí una fuente oficial del país euroasiático en una sesión intergubernamental.
Primera en casi un año de tensiones y enfriamiento en las relaciones bilaterales, la visita de Erdogan fue confirmada por el viceprimer ministro turco Mehmet Shimshek, quien se encuentra en Moscú para una reunión de trabajo.
Comentó Shimshek durante sus pláticas con el vicepresidente Arkadi Dvorkovich que Erdogan aceptó el viaje a San Petersburgo el 9 de agosto para conversar con Putin.
A fines de junio se publicó una misiva del mandatario, en la cual ofrecía disculpas y arrepentimiento a su par ruso tras el derribo, por cazas turcos, de un avión de combate Su-24 que realizaba operaciones antiterroristas en Siria. Putin catalogó esa acción de un golpe por la espalda.
Versiones de la prensa turca informaron que, según Erdogan, los pilotos actuaron por cuenta propia.
Los dos fueron arrestados a mediados de mes por la supuesta implicación de uno de ellos en la intentona militar.
Luego los presidentes sostuvieron el primer contacto telefónico y acordaron dar pasos para restablecer los vínculos económicos y comerciales entre los dos países.
Las primeras medidas de Moscú fueron encaminadas a reanudar los viajes turísticos y las conexiones aéreas con Estambul y Antalya, destinos favoritos de los turistas rusos.
Al respecto expresó aquí Shimshek que las dos naciones necesitaban cuanto antes normalizar las relaciones bilaterales.
Dvorkovich, a su vez, indicó que las disculpas de Turquía por el derribo de la nave rusa y la muerte del comandante de vuelo crearon una base para la restitución de los nexos entre Ankara y Moscú.
Presididas por Dvorkovich y Shimshek, las delegaciones de los dos países evalúan los temas de seguridad en la transportación y permanencia de turistas rusos en territorio turco y la reanudación de vuelos chárteres.
Asimismo figuran en la agenda las relaciones económicas, comerciales y la cuestión energética bilateral, esferas que fueron severamente afectadas por las medidas especiales impuestas por el gobierno ruso desde enero del presente año.